Cólico del Lactante Infantil
Fisioterapia Pediátrica
Si has llegado hasta aquí es seguramente porque que tu bebé llora de forma inconsolable día tras día y no eres capaz de calmarlo a pesar de que has intentado de todo y aparentemente goza de buena salud, si es así es muy posible que esté sufriendo de cólico del lactante.
Y es que el cólico del lactante es mucho más común de lo que creemos, y genera una gran sensación de desasosiego e impotencia tanto a los padres como al propio bebé, y por qué no decirlo, exasperación, ya que esto se acentúa en las últimas horas de la tarde y sobre todo por la noche, entrando en un círculo vicioso de no dormir, cansancio, preocupación, desesperación y ya, por último, abatimiento.
Pero mamás y papás, tranquilos, no estáis solos, vamos a dejar claro qué es el cólico del lactante y qué podemos hacer para confortar a nuestro hijo, y es que el cólico del lactante, a pesar de lo que pueda parecer, tiene solución, así que sigue leyendo y ya verás como podemos arrojar un poco de luz a esta situación. ¡Ánimo!
¿Qué es el Cólico del Lactante?
El cólico del lactante es una disfunción del bebé que suele comenzar alrededor de las 2-3 semanas de vida y puede llegar hasta los 4 meses de edad.
¿Qué síntomas tiene el Cólico del Lactante?
Los síntomas que presentan son:
- Llanto intenso e inconsolable que puede durar varias horas siendo más común por la tarde-noche, apareciendo de forma repentina.
- Distensión abdominal, la barriga está hinchada.
- Puños del bebé apretados mientras dura el llanto.
- Las rodillas se presionan constantemente hacia el abdomen
- Expulsión de gases
- Agitación, movimiento continuo, se ve al niño incómodo.
Causas del cólico del lactante
Creemos que la causa principal de los cólicos es la inmadurez del intestino, esto provoca que los movimientos que debe producir para movilizar las heces (peristaltismo) no sean correctos y se produzcan esos “retortijones”.
Se debe tener muy en cuenta el tipo de lactancia, observaremos la forma en la que el bebé se alimenta por si la causa fuese un mal agarre por un problema, por ejemplo, de frenillo. En el caso de una lactancia de fórmula, podría darse que el agarre al biberón tampoco fuese el adecuado y esto estuviese provocando los cólicos.
Otras de las causas que muchas veces se pasa por alto y se deben valorar son problemas músculo-esqueléticos en el bebé, como por ejemplo una posible tortícolis congénita que no permite al bebé colocarse de forma correcta, o alguna estructura de la cabecita que haya quedado algo presionada a la hora del nacimiento y tengamos que corregir.
¿Cómo diagnosticamos el Cólico del Lactante?
Para determinar el diagnóstico de cólico del lactante, se tienen en cuenta tres requisitos:
- El bebé llora más de 3 horas al día
- El llanto debe darse más de 3 días a la semana
- Este cuadro debe repetirse durante más de 3 semanas
Estos requisitos no son concluyentes a la hora del diagnóstico, pero sí son una buena guía para llegar a esa conclusión.
Tras hacer una valoración exhaustiva del bebé y de todo lo que pueda influir en su estado, podemos decir que el llanto y la incomodidad vienen provocados por el cólico, y en muchas ocasiones acuden a fisioterapia diagnosticados por su pediatra.
¿En qué mejora él bebé con el tratamiento?
- Mejorar los movimientos y el tránsito intestinal.
- Disminuir la tensión muscular abdominal que tenga el bebé.
- Atenuar los reflujos y las regurgitaciones del bebé.
- Ayuda a la eliminación de gases y expulsión de heces, evitando con ello el estreñimiento.
- Mejorar el estado de nerviosismo que pueda presentar el bebé.
Tratamiento del Cólico del Lactante con Fisioterapia
¿Y cómo la Fisioterapia ayuda en el Cólico del Lactante? Uno de mis objetivos es poder acercar la fisioterapia a los papás y mamás ya que a día de hoy existe un gran desconocimiento de los beneficios de la fisioterapia pediátrica y del impacto directo que esta tiene en la salud de nuestros hijos.
Cada caso será analizado de forma individual y sin dejar de lado ningún detalle que pueda estar influyendo en el lactante, tales como:
- Recogeremos información individualizada de los síntomas del bebé: Hora de los llantos, duración, intensidad, continuidad, o si se consigue calmar de alguna manera.
- Tipo de Lactancia: Valoraremos la forma en la que el bebé se alimenta por si, como hemos comentado anteriormente, hubiese algún problema de agarre, ya sea provocado por la postura o por algún problema intrabucal.
- Estado músculo-esquelético y visceral: Valoraremos si existe tensión en alguna estructura relacionada con la cabecita o el cuello del bebé, así como en el abdomen, por si a nivel visceral hubiese algo que no estuviese funcionando de forma correcta, ocasionando problemas digestivos y la trataremos con terapia manual para poder corregirlos y así solucionar el problema.
- Pautas para las familias: Daremos consejos a las mamás y papás para poder sobrellevar las crisis cólicas, como posturas que ayuden a los bebés a calmarse y cómo actuar ante el llanto desconsolado del bebé.
Con toda esta información tendremos un gran punto de partida con el que tratar al peque y así poder empezar a solucionar el problema desde la primera sesión combinando terapia manual y educación postural. A pesar de que todos los llantos puedan parecer iguales, cada bebé tiene necesidades específicas que son las que vamos a intentar solucionar en el menor tiempo posible.